Los libros de cocina o demás medios relacionados a la alimentación (revistas, blogs, sitios web y televisión) pueden ser tanto inspiradores como intimidantes. Puede pensar que tener los mejores, los más caros y los ingredientes más difíciles de rastrear es la clave para cocinar.
Mi enfoque es más simple que eso: compras los mejores ingredientes disponibles y los combinas de manera que tengan sentido en un día determinado.
Una pasta carbonara hecha con huevos frescos de la granja o un pollo rostizado con gallina criada localmente y asada con aceite de oliva aromático, tomates cortados en rodajas directamente del huerto, son experiencias que no se pueden duplicar con los ingredientes del supermercado. Pero esos ingredientes son un privilegio tenerlos a mano, y es raro o poco realista que la gente común y corriente los coma todos los días.
Por lo tanto, procuremos comprar en el mercado donde los agricultores llevan sus productos, en el puesto de verduras de la esquina o en la tienda de comestibles de productos especiales. Cuando pueda, haga su pedido en línea para comprar alimentos verdaderos (como granos, frijoles, etc.) directamente de la fuente o de un minorista de alimentos de confianza. Gaste su dinero en los mejores ingredientes que pueda pagar, invierta en algunos alimentos básicos de la despensa y omita la comida procesada bolsas con supuestamente la última versión en sales y aceites.
¿Qué hay de lo orgánico? Las opciones orgánicas están en todas partes ahora, incluso en los pequeños supermercados. Así que, como muchas otras personas, compro más alimentos y productos de origen orgánico que hace veinte o incluso diez años ni existían.
La elección de los alimentos es personal, financiera y sí, política. Se convierte en una cuestión de cocina cuando se trata de nutrición, frescura y sabor.
Y esto es lo que siempre digo y hago: si puede cultivar un huerto, incluso algunas hierbas, hágalo. Elija verduras locales de un agricultor concienzudo en lugar de verduras orgánicas de una corporación multinacional. Compre la mejor comida que pueda encontrar cuando no pueda encontrar comida local. Evite todo lo procesado en exceso, orgánico o de otro tipo. Y sea flexible; puede haber ocasiones en las que la mejor verdura que pueda encontrar no solo no sea local ni orgánica, sino que incluso podría estar congelada.
Usemos sentido común. U al final no nos compliquemos.