Esta es la cuarta entrega en la nueva serie “Usted pregunta
y Yayi responde” aquí en el blog de Life Blends. La idea es responder preguntas sobre temas de nutrición y políticas alimentarias. Si tiene alguna pregunta puntual, envíelas a lifeblends@gmail.com y trataré de responder.
La pregunta para esta semana es: ¿Puede la pizza alguna vez ser buena para la salud?
Me encanta la pizza. Mi idea de perfección culinaria es pizza y ensalada. Pero no cualquier pizza o cualquier ensalada.
Hace algunos años, viajé con mi familia a Italia. Llegamos a Sorrento y fuimos al restaurante Aurora, en el medio de la plaza. Y resultó ser una maravilla horneada al fuego con una corteza delgada acompañada de una ensalada de rúcula, ambos con un sabor extraordinario.
Tal vez fue la compañía o tal vez es solo que en Italia todo sabe bien, pero no puedo imaginar una comida más perfecta. A juzgar por las largas filas de personas que comen pizza todos los días, no estoy solo en la adoración de la pizza.
¿Y por qué no? La pizza puede ser una comida completa y equilibrada por sí sola. Según Mitchell Davis, cuyo libro "Kitchen Sense" (Clarkson Potter, 2006) consulto a menudo sobre estos temas, la pizza es simplemente un pan plano con cosas encima.
Su clásica pizza Margherita comienza con una masa de harina de trigo y le agrega aceite de oliva, tomates, un puñado de queso y unas hojas de albahaca. Estos ingredientes se ocupan de muchos requisitos nutricionales básicos. El trigo y el queso aportan proteínas. El aceite de oliva es fuente de grasas buenas, y la salsa de tomate aporta vitaminas y antioxidantes. La mayor parte de su vitamina C será destruida por el alto calor del horneado, pero queda suficiente para hacer de la salsa de tomate una fuente importante de vitamina C en las dietas panameñas. La albahaca también tiene algo. Y, como dice Davis, "si su corteza es sabrosa y crujiente, no debería tener que cubrirla con montones de chatarra". Puedes ver por qué me gusta su libro.
Mi pizza ideal de Sorrento no es lo que la mayoría de panameños comen todos los días. Las pizzas comerciales contienen versiones de esos mismos ingredientes en letras grandes y de gran tamaño. Las pizzas de comida rápida contienen cantidades masivas de corteza, aceite vegetal y queso de imitación, todo cubierto con masas adicionales de pepperoni y carne. El resultado es un sabor más suave acompañado de una gran cantidad de calorías.
Puedo entender bien por qué todas las cadenas de pizzerías y la mayoría de restaurantes italianos en Panamá se resisten a que exista una regulación de etiquetado de calorías. Simplemente, venden pizzas tan condimentadas y grandes que no son buena para nadie. Y aunque están supuestas a ser tamaño familiar, mucha gente se las come enteras.
Una vez sacamos una regla y una balanza, luego calculamos usando las tablas de composición de alimentos y determinamos que la rebanada medía de 14 pulgadas de lado pesaba una libra. Así es, una libra completa. Un tamaño de porción estándar para una pizza, según el MINSA y el USDA, es de 3 onzas y 260 calorías. Esta porción era más de cinco porciones estándar y 1,400 calorías. Pero esta era una pizza de masa fina. Las cortezas más gruesas y más coberturas agregan más calorías.
Por eso creo que todo alimento debería tener muy visible su tabla nutricional, en especial el contenido calórico. Si se enumeran las calorías de las pizzas que viajan en motoneta por toda la ciudad, se darían cuenta que una porción de 3 onzas de corteza por sí sola tiene aproximadamente 250 calorías. Ahora súmele el aceite (120 calorías por cucharada), el queso mozzarella (75 por onza) y el pepperoni (140 por onza), y seguramente acumularían más de lo que usted piensa.
Una porción de una pizza pequeña no levanta dudas nutricionales. Pero la mayoría de los lugares que sirven pizzas no parecen lo suficientemente pequeñas como para que las coma una sola persona. Sumando cada uno de los ingredientes que tienen, ahora sabemos que tienen 2,000 calorías cada una, lo que equivale a un día de calorías. Y esto es solo un plato en una comida. Coma todo y no se sorprenda si tiene problemas para controlar su peso.
Como tantas otras cosas en la dieta panameña, la pizza puede ser lo que sea que hagas con ella, una comida deliciosa y completamente saludable (especialmente con algunas verduras), o una comida chatarra, que es mejor evitar, excepto ocasionalmente en pequeñas dosis. Incluso con los precios en aumento de hoy en día, la pizza proporciona calorías baratas y muchas, tantas que es mejor compartirlas entre amigos.
En suma, se le agregas los “toppings” correctos, la pizza puede ser una comida balanceada y saludable.
Yayi Carles