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Alimentos Orgánicos

Rafael Carles

IG-7

Alimentos Orgánicos

En los cinco meses que llevo escribiendo esta columna, muchos lectores han enviado preguntas sobre alimentos orgánicos. Y he decidido agruparlas y resumirlas a continuación.

¿Cuál es la diferencia entre "100% orgánico" y "orgánico"? Orgánico tiene un significado preciso bajo el programa orgánico del USDA. En Panamá no existe reglamentación ni sistema de etiquetado orgánico. En los Estados Unidos, por ejemplo, el certificado 100% orgánico significa que todos los ingredientes de un producto han sido cultivados o criados de acuerdo con los estándares orgánicos del USDA, que son las reglas para producir alimentos etiquetados como orgánicos. La certificación orgánica requiere que del 95 al 99 por ciento de los ingredientes sigan las reglas. Repito, en Panamá no existe un sistema de etiquetado que regule la producción orgánica. Se entiende muchas veces que si un producto no conlleva el uso de plaguicidas, califica como orgánico. La verdad es que no es cierto; es libre de plaguicidas pero no necesariamente es orgánico.

¿Cuáles son exactamente esas reglas? La principal es que las frutas y vegetales no se pueden cultivar con pesticidas sintéticos, herbicidas, fertilizantes, modificación genética, irradiación o lodos de aguas residuales. Igualmente, los animales como ganado, pollos y cerdos deben criarse exclusivamente con alimentos orgánicos, tener acceso al aire libre y no pueden recibir medicamentos antimicrobianos ni hormonas. Y la norma establece que los productores serán inspeccionados para asegurarse de que estas prácticas se sigan al pie de la letra.

¿Cómo sabemos que "orgánico" realmente refleja la mejor forma de cultivar alimentos? En la década de 1920, el botánico británico Albert Howard aprendió al observar a los agricultores de la India que la salud humana depende del cultivo sostenible de alimentos. Los granjeros hindús le enseñaron la importancia de proteger los nutrientes del suelo a través del estiércol compostado, la rotación de cultivos y el cultivo adecuado, y el uso de controles biológicos de plagas. Más tarde, estos métodos fueron llamados "orgánicos". Pero las reglas orgánicas tanto las del USDA como de otros países no dicen una palabra sobre la sostenibilidad. Esta brecha se produjo como resultado de la historia de los estándares orgánicos, pero también como resultado de los conflictos de intereses inherentes dentro de las agencias reguladoras y las instancias gubernamentales. El trabajo principal del MIDA, por ejemplo, es promover la agricultura industrial y aumentar la producción. Los productos orgánicos, simplemente, no están dentro del abanico de prioridades del MIDA o del USDA.

¿Las empresas de alimentos usan la palabra "orgánico" de la misma manera que "salud"? Las reglas para los productos orgánicos se refieren a la letra de la ley, no a su espíritu. Los comercializadores de alimentos, sin embargo, se aprovechan de las percepciones públicas de que "orgánico" implica espíritu: sostenibilidad y mejor nutrición. Las empresas que siguen las reglas pueden comercializar legítimamente alimentos altamente procesados como orgánicos, aprovechando su aura de salud para obtener precios más altos. No es de extrañar que tantas grandes compañías de alimentos hayan comprado líneas de productos orgánicos para comprar aceptación y ganar buena imagen corporativa. Sí, la comida chatarra orgánica no contiene pesticidas sintéticos, pero los alimentos aún tienen calorías. Una comida chatarra orgánica sigue siendo una comida chatarra.

¿Qué es peor: comer productos no orgánicos llenos de pesticidas o no comer ningún producto? La investigación demuestra beneficios sustanciales para la salud al comer frutas y verduras. Aunque desearía que tuviéramos una investigación más definitiva, estos beneficios parecen superar con creces cualquier riesgo de los pesticidas. Existe una lista de los “Dirty 12”, aquellos alimentos con mayor probabilidad de tener un alto contenido de pesticidas. Estos, según el Environmental Working Group (ewg.org), son melocotones, nectarinas, manzanas, pimientos, fresas, cerezas, peras, frambuesas, uvas importadas, apio, patatas y espinacas. Por el contrario, los alimentos que se pelan (cebollas, guisantes, plátanos, maíz dulce y frutas tropicales, por ejemplo) tienden a tener un bajo contenido de pesticidas.

¿Vale la pena la comida orgánica por su alto costo? Los alimentos cultivados en suelos sostenibles deberían contener niveles más altos de nutrientes, y algunos estudios demuestran que así es, pero la certificación orgánica no requiere valores nutricionales más altos. Sin las pruebas, sería difícil saber si los alimentos orgánicos que estoy comprando son realmente mejores desde el punto de vista nutricional. El punto principal de los productos orgánicos son los métodos de producción, y estos requieren mano de obra y una gestión cuidadosa, los cuales tienen un costo más alto. Si cree, como yo, que cultivar alimentos de acuerdo con prácticas orgánicas es mejor para el medio ambiente, entonces vale la pena pagar más si puede permitírselo.

¿No son los orgánicos un poco elitistas? La gente no puede comprar alimentos orgánicos si no están disponibles a un precio asequible. Una vez escuché a Eric Schlosser responder una pregunta similar dirigida a su libro, "Fast Food Nation". Señaló que los movimientos sociales tienen que comenzar en alguna parte y que varios comenzaron con las élites pero terminaron ayudando a los pobres y marginados, por ejemplo, los movimientos de derechos civiles, ambientales y de mujeres. Yo agregaría el Movimiento de Alimentación Saludable a esta lista. Ya desde una humilde tribuna hemos obligado a muchos productores en las provincias y en la capital a comenzar a reducir los pesticidas y criar animales de granja de manera más humana. A medida que aumenta la oferta de alimentos orgánicos, los productos orgánicos se vuelven más asequibles y son más “democráticos”.

Pero, por favor, no culpe a los productores orgánicos por los altos precios. Hasta la más reciente ley de estrategia agrícola (PADE), que tiene una pequeña disposición para la promoción de la agricultura orgánica, los agricultores orgánicos no recibirán ni un solo incentivo de parte del Estado. En contraste, los productores de arroz y otros rubros continúan recibiendo alrededor de $80 millones al año en subsidios agrícolas. La agricultura industrial también se beneficia de los programas de marketing administrados por el IMA, cada vez que realizan ferias y promueven sus productos. Por el contrario, el MIDA considera las frutas como "cultivos especiales". Este tipo de política alimentaria se manifiesta como precios más altos en la tienda de comestibles. Lidiar con el elitismo que implica el mayor costo de los productos orgánicos significa hacer algo con respecto a las desigualdades de ingresos. Si queremos que los políticos se preocupen más por la salud pública que por la salud corporativa, trabajemos para eliminar la corrupción de las contribuciones a las campañas electorales. Si la Asamblea Nacional y los diputados estuvieran menos en deuda con el poder económico, podríamos crear un sistema que pagara a los agricultores y trabajadores agrícolas decentemente y vendiera alimentos orgánicos a precios que todos pudieran pagar. Cada vez que miro un huerto orgánico reflexiono sobre la forma en que debemos cultivar nuestros alimentos. Espero que algún día existan políticas agrícolas que incluyan la letra y el espíritu del movimiento orgánico.

Si usted tiene alguna pregunta sobre alimentación o nutrición, envíelas a lifeblends@gmail.com y trataremos de responderla.