Con la crisis de COVID-19, muchos hemos buscado formas de apoyar el sistema inmunológico a través de la dieta y el estilo de vida como parte de nuestros protocolos de defensa. Con ese espíritu, quiero compartir algunos conceptos que respaldan el kit de shots de Life Blends, formulado al inicio de la pandemia precisamente para fortalecer el aparato inmunológico. Y en lugar de centrarme en uno o todos los shots, me centraré en explicar las razones del por qué sentimos es la mejor estrategia para potenciar el equilibrio inmunológico.
El sistema inmunológico requiere de muchos elementos para luchar contra posibles patógenos y otras amenazas para la salud. Estos componentes trabajan juntos para construir una barrera física a los patógenos, identificar las amenazas que entran al cuerpo, atacar y eliminar las amenazas y recordar las amenazas para actuar en consecuencia en el futuro. La respuesta inmune se divide en dos categorías principales: innata y adaptativa. La inmunidad innata incorpora mecanismos no específicos que actúan de inmediato contra los peligros percibidos, mientras que la inmunidad adaptativa es más compleja, es específica de un antígeno e involucra la memoria.
Al preparar los shots de Life Blends, entendimos que es mil veces mejor incorporar ingredientes 100% naturales en vez de utilizar polvos sintéticos o medicinas dañinas, porque sabemos que ciertas frutas y vegetales proporcionen niveles suficientes de nutrientes que apoyen los diferentes componentes del sistema inmunológico, incluyendo ingredientes con propiedades antimicrobianas, soporte antioxidante, efectos antiinflamatorios y beneficios para el microbioma.
Los nutrientes que mejor apoyan al sistema inmunológico incluyen las vitaminas A, C, D, E, las vitaminas B (especialmente B6, B9 y B12), hierro, zinc, selenio, cobre y magnesio. Muchos de estos nutrientes tienen múltiples funciones, apoyando la barrera física, así como las células y los procesos involucrados en las respuestas innatas y adaptativas. Si bien estos nutrientes se encuentran en una variedad de alimentos, la gran mayoría de las personas tiene una ingesta dietética inadecuada de muchos de estos nutrientes esenciales: 45% son insuficientes en vitamina A, 50% en vitamina C, 95% en vitamina D, 84% en vitamina E y 15% en zinc. No por casualidad el COVID-19 ha golpeado tan duro a la humanidad. No es que el virus sea fuerte, es que las personas están débiles.
Cuando hablamos del apoyo al sistema inmunológico, no podemos omitir la importancia del microbioma, especialmente el microbioma intestinal. Esas bacterias desempeñan varias funciones, incluida la creación de la barrera física, las propiedades antioxidantes y los efectos antiinflamatorios. Por eso, el consumo de alimentos que respaldan un microbioma intestinal equilibrado y saludable también respalda el sistema inmunológico.
De allí que cuando diseñamos el Kit de shots y formulamos los cinco shots (Ninja, Flu, Jamu, Turmeric y Energy), teníamos en mente una sola cosa: su salud. Porque para eso sirve el caudal de jugos de limón, jengibre, cúrcuma, tamarindo, manzana verde y ajo; además del echinacea, aceite de orégano, sal de Himalaya, pimienta cayena, carbón activado y agua de coco.
¿Qué más natural y más energético que eso? Nada. Este es el protocolo preventivo que se debiera aplicar en estos tiempos de pandemia y también cuando llegue la normalidad.